lunes, 11 de julio de 2022

“Cuando nació este Sol murió toda la gente del norte, por eso algunos se refugiaron en ciudades subterráneas”


Nuestra apreciada maestra, Quinturay Raypán.


En “Amplias muestras de vidrios fueron generados por bolas de fuego cometarias durante el Pleistoceno tardío en el desierto de Atacama, Chile” (http://losvikingosenamerica.blogspot.com/2022/07/amplias-muestras-de-vidrios-fueron.html) se ha abordado el estudio geológico de las consecuencias en Atacama del impacto de bolas de fuego cometarias durante el Pleistoceno Tardío (Superior). Y tal como se indicaba, el Mythos Légein de Chile preservó el conocimiento de este evento cósmico-planetario. De esta manera, una anciana suffmashife o dugun-machife, es decir, intérprete del lenguaje secreto de la machi, de Gorbea, en la Araucanía, comunicó a la maestra Quinturay Raypán una tradición fragmentaria de este acontecimiento.

Así, en Santiago, el 1º de Marzo de 2005, Quinturay Raypán me indicó:

Esta es la sexta Luna y el Sol, el cuarto, porque cuatro soles se han visto, cuatro soles aparecen en los kultrunes. Todo ha sido destruido con grandes cataclismos donde se daba vuelta la tierra y hasta el Sol se pierde. 

Cuando nació este Sol murió toda la gente del norte, por eso algunos se refugiaron en ciudades subterráneas, bajo el desierto y en el interior de los volcanes. Los que quedaron arriba, se volvieron tontos.

La comunicación de la suffmashife de Gorbea es trascendental. Una hebra al conocimiento sagrado de la sucesión de los soles o “grandes ciclos” y su plasmación como símbolo en el kultrún y por cierto, de las ciudades subterráneas del Minche Mapu o “tierra de abajo” donde habitan los alhues e iniciados de Chile.

Rafael Videla Eissmann
10 de Julio de 2022


* (Los textos de http://losvikingosenamerica.blogspot.com/ son exclusivos. Se prohíbe su reproducción).

lunes, 4 de julio de 2022

Los Dioses de Chile


Representación petroglífica de un viracocha, cerca de Monte Patria, en la Región de Coquimbo,
en el norte de Chile (Fotografía de Rafael Videla Eissmann, 2016).


Antes de los hombres, antes del tiempo, en la tierra sagrada de Chile, vivieron los dioses.

Fueron seres astrales –extraterrestres– que se plasmaron, parcialmente, antes de la fijación del Eje terrestre, antes del inicio de la palanca de la Gravitación, el Tiempo y sus ciclos.

Arribaron desde más allá de las estrellas, desde el otro lado, a través de Venus, creando o plasmando la Belleza del Paisaje, la Belleza del Mundo: Sus montañas, sus ríos, lagos, sus bosques, sus quebradas y playas como reflejo del Mundo de Luz.

Chile fue la Patria de los Dioses, es decir, de los hówen –los “espíritus”–, de los antupainko –los Hijos del Sol–, de los poderosos pillanes, de los chel-kura y de los venerados viracochas (Huara-Cocha-Ché). Sus descendientes, forjaron por medio de la voluntad la manifestación más pura de su sangre sobre la tierra: La cosmovisión o Ad-Mapu, las “leyes de la tierra” de los chiliche o araucanos.

Con propiedad, son ellos quienes se reconocieron como descendientes de los lituche o glyche, es decir, de los “primeros hombres” –los hombres primitivos o del principio según el abate Juan Ignacio Molina en su Compendio de la historia geográfica, natural y civil del Reino de Chile (1776) y la humanidad blanca y clara originaria del Polo Antártico de acuerdo al profesor Roberto Rengifo en El papel del territorio de Chile en la evolución de la humanidad prehistórica (1935)–. Pues ellos fueron los hijos de los dioses, los verdaderos “hombres de la tierra” (mapuche) –tal como me lo expresara la maestra Quinturay Raypán en Nueva Imperial, en la Araucanía, indicando con su dedo índice la tierra, el Minche Mapu– y cuyos vestigios anteceden toda la historia conocida y que se remonta en términos arqueológicos, a las magníficas y fascinantes manifestaciones líticas de la primera humanidad.

Un eco de todo esto fue la expedición de un grupo de alemanes (1935) para investigar el origen de su raza en Tierra del Fuego, en Karukinka, la antesala de la Antártida.

Rafael Videla Eissmann
4 de Julio de 2022

* (Los textos de http://losvikingosenamerica.blogspot.com/ son exclusivos. Se prohíbe su reproducción).

sábado, 2 de julio de 2022

“Amplias muestras de vidrios fueron generadas por bolas de fuego cometarias durante el Pleistoceno tardío en el desierto de Atacama, Chile”


 
El desierto de Atacama (Imagen del artículo Widespread Glasses Generated by Cometary Fireballs During the Late Pleistocene in the Atacama Desert, Chile, 2022).


En diversos libros y artículos, hemos hecho mención del hito fundamental que separa la historia del mito: Es la Gran Catástrofe que tuvo lugar en torno a 12.000 años, evento cósmico-terrestre que generó la extinción de la megafauna y de la población originaria de América –los verdaderos “pueblos originarios”, es decir, el grupo dolicocéfalo que antecedió a los indígenas braquicéfalos–.

Esta Gran Catástrofe fue el Götterdämmerung de los asen –el Crepúsculo de los dioses (asen) germanos; el Diluvio advertido al rey Svayambhuva Manu (Satiavrata) por el Avatãra de Vishnú, el gigantesco pez Matsya; el Apachiohualiztli de los registros mesoamericanos; el gran Llocllavuno Pachacuti de la tradición andina; el Yporu de los guaraníes –Ara Kañy o Mba’e-megua Guasu– y el Tripalakquen de la lucha entre las serpientes ThrengThreng y KaiKai de los araucanos.

El artículo Widespread Glasses Generated by Cometary Fireballs During the Late Pleistocene in the Atacama Desert, Chile (“Amplias muestras de vidrios fueron generadas por bolas de fuego cometarias durante el Pleistoceno tardío en el desierto de Atacama, Chile”) de Peter H. Schultz, R. Scott Harris, Sebastián Perroud, Nicolas Blanco y Andrew J. Tomlinson y publicado en Geology (50 (2): 205–209 / 2022) da cuenta de los efectos de este evento cósmico en el desierto de Atacama (https://pubs.geoscienceworld.org/gsa/geology/article/50/2/205/609354/Widespread-glasses-generated-by-cometary-fireballs).

https://www.researchgate.net/publication/355860503_Widespread_glasses_generated_by_cometary_fireballs_during_the_late_Pleistocene_in_the_Atacama_Desert_Chile

El artículo Ancient Comet May Have Turned Chilean Desert Into Glass (“Antiguo cometa pudo haber convertido el desierto chileno en vidrio”) de Isaac Schultz, en tanto, aborda el mentado estudio: https://gizmodo.com/ancient-comet-may-have-turned-chilean-desert-into-glass-1847991000

Mas, antes, mucho antes que los conocimientos de las ‘ciencias modernas’, el Mythos Légein del norte de Chile preservó este evento: Así fue registrado por el historiador Carlos Keller en su obra Mitos y leyendas de Chile (1972) bajo el rótulo de El Paraíso de Chungará (Páginas 90-93), el cual a pesar de estar revestido con factores occidentales y de términos y personajes de épocas posteriores, constata la presencia del hombre-dios civilizador Tarapacá Viracocha, fundador del gran Tiahuanaco, la metrópolis de los viracochas, en las cercanías del lago sagrado Titicaca, de la “lluvia de fuego” y por cierto, del Gran Diluvio.

Este singular registro mítico presenta resonancias con lo propuesto por el arqueólogo Adolph Bandelier quien estableció el origen de los viracochas o Dioses Blancos en el sur de Chile, específicamente en Chiloé continental –Chili-hue o “Lugar de los chiles”–, lugar desde donde desarrollaron su migración civilizadora por América (Lauri, Y. B. Una atrevida interpretación de la Portada del Sol. Página 622), y por cierto, a lo expuesto por el profesor Roberto Rengifo al definir que los chiles o viracochas fundaron la primera ciudad monumental, en lo que hoy se llama Tiahuanacu, hace 14.000 años, cuyo nombre primitivo no se sabe, y que tenía por objeto centralizar las creencias y unificar las lenguas ya diversificadas (Rengifo, R. El papel del territorio de Chile en la evolución de la humanidad prehistórica. Página 11).

De manera significativa, el cronista Fray Antonio de la Calancha expresó  hacia 1638 que por cierto este mundo [América] fue habitado de hombres antes del Diluvio.

Rafael Videla Eissmann
6 de Noviembre de 2021 /
1º de Julio de 2022


Bibliografía

Lauri, Yole Beatriz
Una atrevida interpretación de la Portada del Sol. En: Histonium. Año VII. Nº78. Buenos Aires, Septiembre de 1945.

Keller, Carlos
Mitos y leyendas de Chile. Editorial Jerónimo de Vivar. Santiago de Chile, 1972.

Rengifo, Roberto
El papel del territorio de Chile en la evolución de la humanidad prehistórica. Imprenta Universitaria. Santiago de Chile, 1935.

Videla Eissmann, Rafael
El Diluvio y los gigantes. Mitos de Chile a la luz de la Cosmogonía Glacial. Ediciones Tierra Polar. Madrid, 2010.
_ El Gran Diluvio. Mitos americanos sobre la última catástrofe planetaria. Editorial JG. Quito, 2011.
_ Los lituches. Los hombres-dioses de la tradición del sur del mundo. Prólogo de Erich von Däniken. Ediciones Tierra Polar. Santiago de Chile, 2014.


* (Los textos de http://losvikingosenamerica.blogspot.com/ son exclusivos. Se prohíbe su reproducción).