Ilustración de Alonso de Ovalle en la Tabula Geographica Regni Chile (1646).
Ha sido el Reino de Chile desde los principios de su conquista el Flandes del Nuevo Mundo, el palenque y estacada del más conocido valor en la América, así de parte del español en su conquista, como del araucano en su resistencia; ha sido la escuela de la m{as disciplinada milicia, el crisol de la más valerosa constancia y lealtad y la piedra del toque, en que al animoso conquistador quilató la fineza de su animoso corazón y el indio chileno de su valentía en la defensa de sus países, oponiéndose aun con tales desiguales armas a la potencia española, cuando no hubo en toda aquella tan dilatada parte del mundo ninguno de sus poderosos reinos ni imperio quien se atreviese a hacerle punta [oponerse] sin tener luego de contado el desengaño de que las habían con fuerza tan superiores, que pudieron en tan poco tiempo avasallar toda la tierra y ponerla en mano de su rey, haciéndolo señor de más dilatada provincias y reinos que dos veces toda la Europa.
Sólo el indio chileno se atravesó al poder y fuerza española, de manera que de sus principios, ha sido siempre menester reforzarle con nuevos socorros de gente, que han pasado de Europa a este intento en tropas de a quinientos y mil para enfrentar su orgullo y no perder lo ganado..
Alonso Ortiz de Ovalle
Árboles de las descendencias de las muy nobles casas
y apellidos de los Rodríguez de Manzano, Pastene y Ovalles
(1646).
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